martes, 31 de diciembre de 2013

SALMO 16 (17) - E. Cardenal

Oye Señor mi causa justa
                                       atiende mi clamor
Escucha mi oración que no son slogans
Júzgame tú
                          y no sus Tribunales
Si me interrogas de noche con un reflector
con tu detector de mentiras
no hallarás en mí ningún crimen
Yo no repito lo que dicen los radios de los hombres
ni su propaganda comercial
                                          ni su propaganda política
Yo guardé tus palabras
                                   y no sus consignas

Yo te invoco
                   porque me has de escuchar
                                                             oh Dios
oye mi palabra
Tú que eres el defensor de los deportados
y de los condenados en Consejos de Guerra
y de los presos en los campos de concentración
                 guárdame como a la niña de tus ojos
                 debajo de tus alas escóndeme
libértame del dictador
                                  y de la mafia de los gángsters

Sus ametralladoras están emplazadas contra nosotros
y los slogans de odio nos rodean
Los espías rondan mi casa
los policías secretos me vigilan de noche
estoy en medio de los gangsters
Levántate Señor
                         sal a su encuentro
                                                    derríbalos
Arrebátame de las garras de los Bancos
con tu mano Señor líbrame del hombre de negocios
y del socio de los clubs exclusivos
                      ¡de esos que ya han vivido demasiado!
los que tienen repletas sus refrigeradoras
y sus mesas llenas de sobras
y dan el caviar a los perros

Nosotros no tenemos entrada a su Club
pero tú nos saciarás
                             cuando pase la noche.



                                          Autor: Ernesto Cardenal
                                          Título: Salmo 16 (17)
                                          Libro: Salmos

domingo, 15 de diciembre de 2013

CARTA DE UNA HABANERA - Eliseo Alberto

(Carta de una amiga desde Cuba,
La Habana, 6 de julio de 1990. Fragmento)


Estoy cansada de los éxitos incuestionables, de las teorías inamovibles, de los reveses convertidos en victorias y de las victorias que acaban siendo reveses. Estoy cansada de las mentiras repetidas, de las verdades a medias machacadas, de las consignas iguales, de las manipulaciones burdas, de las pancartas optimistas, de los titulares exaltados de la prensa, de los increíbles planes económicos. Estoy cansada del maltrato diario, por gusto, de la grosería espontánea, de la vulgaridad oficial. Estoy cansada del "no hay", del "no te toca". Estoy harta de las guaguas fantasmas, de las colas por todo, de las tiendas sucias y vacías, de la extenuada ciudad que se desploma. Estoy cansada de que me digan quiénes son los buenos y quiénes son los malos. De los principios que no se venden pero que después sí se venden, por soberbia, por orgullo o porque sí. Estoy muy cansada del culto a la personalidad, de la infalibilidad de los dirigentes, de la autosuficiencia, la corrupción, la arrogancia de los que gobiernan. Estoy cansada, cansadísima, de los CDR, el PCC, el MINFAR, el MININT, la FMC, la UJC, la CTC, la UPC, la ANIR y la ECOA 7. Estoy cansada del imperialismo, del capitalismo, del colonialismo, de la lucha de clases, del socialismo y del comunismo. (Por suerte no han logrado cansarme del fascismo ni del estalinismo).

Estoy cansada de repetir -porque no me lo acaban de creer- que no me gustan las invasiones extranjeras, que la opulencia de este mundo es inmoral, que la avaricia y la codicia están condenadas al infierno y que esta civilización moderna es una estafa si no se elimina la muerte por hambre y el suicidio por desesperación. Estoy cansada de no poder decir lo que pienso, de no poder decidir lo que leo, oigo o veo, de no poder hacer planes para el futuro, de no poderme ilusionar con un viaje, de creer en menos cosas cada día. Estoy cansada, muy cansada, cansadísima, de no poder escoger ni siquiera mi propia infelicidad.

FG

                  Libro: Informe contra mí mismo. 

Autor: Eliseo Diego. 
                  Editorial: Alfaguara (1ª ed: 2002)

viernes, 6 de diciembre de 2013

PRIMER AMOR - Luis García Montero

Primer amor.


Aquella casa no era mía.
Yo contraté la luz, el agua y las palabras.
Dispuse que los muebles y los vientos
volvieran a jugar en los balcones.
El paisaje llegaba saludando
igual que los amigos,
y al levantar la mano y las botellas
abril subía por el ascensor
y las colinas de la tarde
cambiaban amapolas por un whisky.

Yo contraté la noche para cerrar las uertas.
Quise quedarme solo con mi amada,
quedarme dentro de las horas
que ruedan con la miel de dos desnudos.
Yo preparé las sábanas, los libros, los armarios,
pinté de blanco las paredes,
pero la casa aquella no fue mía.

Porque empezó a llovar
durante todo un año y el siguiente,
y el otoño manchaba los pasillos
con silencios mojados y zapatos,
y estuvo el mes de enero
helando hasta cortarse con nuestra soledad
y nuestra ropa sucia,
y el coche que subió por la colina
de barro y abandono
vino para decirme
que aquella casa no era mía.

Y aquella casa no fue mía.
Aprender a vivir enamorado,
saber amar,
significa también sentirse libre
cuando un amor se acaba.
Las ruinas de hoy
no son ya mi dolor ni mi recuerdo.
Veo como un extraño
la ventana forzada, las paredes con grietas,
los azulejos rotos.

La lluvia que pregunta en la esquina por mí
sabe que aquella casa no era mía.



Autor: Luis García Montero                               
Libro: Vista cansada.                                         
Edit: Visor Poesía. Colección Palabra de Honor.

domingo, 1 de diciembre de 2013

NUESTRA HORA

Es tarde
pero es nuestra hora.

Es tarde
pero es todo el tiempo
que tenemos a mano
para hacer el futuro.

Es tarde
pero somos nosotros
esta hora tardía.

Es tarde
pero es madrugada
si insistimos un poco.



               Autor: Pedro Casaldáliga
               Libro: El tiempo y la espera (1986).